Martí y la práctica atlética.

José Martí también halló un espacio para la actividad física en su apasionado mundo de la reflexión. Hizo consideraciones sobre el asunto en crónicas deportivas de le época.

Fiel observador y crítico, describía en ellas hasta el mínimo detalle de los eventos. Puede afirmarse que el Apóstol fue, sin duda alguna, uno de los primeros periodistas cubanos que escribió acerca de los deportes desde el extranjero.

El apóstol nos legó también bellos pensamientos sobre la educación del cuerpo y del espíritu. Entre ellos entresacamos los siguientes:
“Nada fortalece tanto como el ejercicio de la fuerza”
“La mente ha de ser bien nutrida, pero se ha de ver, de dar, con el desarrollo del cuerpo, buena casa a la mente”.
“La esgrima aumenta y ordena las facultades del hombre”.

Martí fue un asiduo practicante del juego ciencia.. Sin embargo, hasta la fecha se conoce el desarrollo de una sola partida realizada por él. Fue celebrada en Ciudad de México en el año 1876 frente a un niño prodigio Andrés Ludovico Viesca.

La histórica partida, que culminó en una derrota para el guía intelectual de la Revolución cubana y en la que no debe buscarse el valor técnico, sino contemplarla como documento histórico

Sin embargo, el más universal de los cubanos fue un duro crítico de los deportes donde predominaba la violencia. El boxeo, las corridas de toros, las competencias de corredores a pie y el fútbol americano recibieron su afilado verbo.

Se conoce que practicó una sola especialidad: el ajedrez; pero en sus crónicas demostró conocimiento sobre, billar, equitación, esgrima, caza, corridas de toros y patinaje, entre otros.

Cuando se hable de periodismo deportivo es válido recordar entonces al hombre de La Edad de Oro, insigne pensador de la política y la cultura latinoamericanas, quien en su impronta creativa no olvidó la apasionante esfera de la actividad del músculo.