Preservan ecosistemas costeros en Pinar del Río
Escrito por María Bárbara Hernández Hernández
La preservación de las franjas costeras constituye una prioridad en la provincia más occidental del archipiélago cubano y es interés nacional el beneficio de esos ecosistemas, esenciales para la economía y la vida.
En particular los manglares constituyen una primera barrera de contención en casos de temporales o ciclones, al proteger a la población de las inundaciones en los casi 6 000 kilómetros de litoral de Cuba, y su importancia es aun más vital por la posición geográfica de la Isla, muy azotada por meteoros de gran intensidad.
Ello es una razón importante para que en Vueltabajo se ejecuten acciones de conservación de las costas. Para ello se realizan investigaciones sobre la conservación de manglares y otras floras, además, de especies animales propias del litoral.
Por eso se perfeccionan las estrategias para acometer la reconstrucción de poblados costeros en lugares apropiados, al reportarse daños por vientos huracanados, en los últimos años, en comunidades como Punta de Carta, Cortés, Boca de Galafre y Las Canas, entre otras.
La mayoría de esos caseríos surgieron casi al unísono del núcleo principal de la provincia, y las edificaciones se levantaron sobre la duna, de ahí el propósito de modificar esa práctica y propiciar el correcto intercambio del mar con la arena.
Estudiosos vueltabajeros laboran por rescatar la vegetación costera, muy castigada en diversos puntos pinareños por los huracanes y en pos de ello se recolectan semillas de mangles típicas de esas zonas, sembradas en viveros para después trasplantarlas a su medio natural.
Asimismo se intensifica la reforestación de uverales para lograr un adecuado equilibrio entre agua salobre y dulce y evitar la salinización en playas y cayos.
La uva caleta, propia de los litorales arenosos y pedregosos, desempeña una función preservadora contra las salpicaduras de las aguas, ya que sus hojas son capaces de captar más del 50 por ciento de la sal diseminada en el ambiente.
Mientras en Cuba constituye prioridad el cuidado de las costas, en otras partes del mundo las poblaciones de peces grandes disminuyeron en el 90 por ciento en el último siglo, los desechos plásticos causan la muerte a varios miles de aves marinas anualmente, y se calcula que varios millones de barriles de petróleo fluyen en los océanos.
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