San Juan: otra cuna de “La Historia me Absolverá”

Superados con creces por la Revolución los preclaros sueños e ideas de una generación patriótica encabezada por Fidel, La Historia me Absolverá mantiene plena vigencia porque el contenido de su programa e ideología continúa impulsando a los cubanos a actuar y pensar en grande.

Fue el conocimiento de la verdad concentrada en el folleto que se distribuyó con todos los riegos en el país, la que contribuyó decisivamente a reorganizar las filas de la vanguardia, enriquecerla con un instrumento ideológico, y sumar a ella a miles y luego millones de cubanos.

Una de las dos ediciones que se imprimieron en Cuba. tuvo como sede a la imprenta de Juan Gener o Nenito Gener, como mas comunmente se le conocía en San Juan y Martínez.

Cuando se cumplen justamente 61 años de este hecho ocurrido según el entrevistado,  entre los dias 21 y 25 de julio de 1954 es histórico recordar algunas de esas respuestas .

¿Por qué San Juan?

“Opino que por la tradición de lucha de los sanjuaneros, mi posición contra el gobierno y porque tenía una imprenta donde se publicaba el periódico Adelante, que sistemáticamente acusaba a Batista de los desmanes que estaba cometiendo. Además, en otras ocasiones habíamos impreso materiales revolucionarios para enviarlos a otras provincias.

“Sin ningún aviso se me aparecieron Ángel Eros, Pedro Esperón y uno que le decían El Cubano. Venían de parte de Melba Hernández para si yo estaba dispuesto acometer la tarea. Dije que sí y sólo se lo comunique a Mundo Díaz (fallecido) cajista, porque había que hacerlo en el más estricto secreto.

“Trabajamos de noche y en tres días imprimimos 500 ejemplares del  histórico documento. Tuve que comprar en La Habana un juego de letras de 10  ó 12 puntos, una negra para el encabezamiento de arriba y la otra para la lectura,  distinto al que utilizaba normalmente, porque la policía frecuentemente registraba la imprenta.

Lo guardábamos junto al papel que trajeron para casa de Cuca García, que vivía en una cuartería al fondo del local.

“Ellos me habían dado un teléfono,  los llamé cuando terminamos, y vinieron a recoger nuestra edición de La Historia me Absolverá. Recuerdo que la metieron debajo de la alfombra del maletero del carro. Aquí no se dejó ninguna copia.

Como tambien tuvimos la oportunidad de conversar en su residencia en La Habana con el asaltante al Palacio Presidencial. Ángel Eros este nos confesó que mando a buscar las copias con un amigo de Guanajay perteneciente al M-26-J para entregarlas a los reunidos junto a la tumba de Ruben Batista en el cementerio de Colón a un año precisamente de la heróica acción del asalto a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Cépedes.

Para los sanjuaneros es motivo de orgullo revolucionario que esta pieza oratoria haya logrado hacerse realidad en el territorio, por lo que ella representa como paradigma de justicia y soberanía, principios muy escasos en el convulso mundo de hoy.