Pinar también está en zafra

Con seis estructuras productivas (entre cooperativas y UBPC) dedicadas a aportar materia prima para los centrales, cañaverales saludables, macheteros destacados, operadores de combinada millonarios, y una estrategia dirigida a continuar incorporando nuevas áreas; a pesar de no tener industria propia, Pinar del Río también está en zafra.

Según los especialistas, ello responde a la cercanía a los centrales Harlem y 30 de Noviembre, la experiencia acumulada durante mucho tiempo, y la buena calidad de sus plantaciones. Este último, un rasgo común desde la CPA Capitán Tomás, una de las más pequeñas, donde todo el corte se realiza de forma manual, hasta la CPA José Manuel Lazo, dueña de un pelotón mecanizado de alta efectividad, que tras concluir las labores en la cooperativa, suele apoyar a otras entidades de la provincia de Artemisa.

Frente a un pizarrón donde se recogen al detalle los principales indicadores de la contienda, Orlando Pérez, jefe de producción de la José Manuel Lazo, asegura que tradicionalmente los números han hablado a su favor. Así sucede también en este 2013. De 34 952 toneladas estimadas para la campaña, todo indica que se podrán sobrepasar las 40 000. Ello implicaría superar en más de 7 000 toneladas la producción lograda en el 2012.

"Hasta el momento, los rendimientos se comportan a 65 toneladas por hectárea (ha), y son los mejores entre todas las estructuras que tributan al central 30 de Noviembre", comenta Orlando. No obstante, considera que tales cifras todavía se pueden elevar considerablemente.

"Con la nueva división político-administrativa, nuestra CPA quedó a cargo de 500 hectáreas que anteriormente estaban subordinadas a una UBPC de San Cristóbal (uno de los tres municipios cedidos a Artemisa). "En su gran mayoría, se trata de plantaciones antiguas y con bajos rendimientos, que ha habido que demoler para volver a sembrar. De modo que según nuestros cálculos, dentro de tres años, esas mismas áreas deberán aportar el doble de lo que entregan hoy.

"Por otra parte, hemos ido recuperando tierras que estaban infestadas de marabú en otras zonas de la cooperativa. Todo ello suma 922 ha en la actualidad, pero esperamos llegar a 1000 ha al cierre del año", explica Orlando.

Para Jorge Félix Díaz, jefe del pelotón de corte mecanizado, teniendo en cuenta los precios actuales que posee la caña, esta constituye una actividad atractiva. "Hoy todo el mundo se encuentra motivado a incrementar cuanto sea posible la producción", dice, y a renglón seguido reconoce la organización que se ha logrado alcanzar.

"Aun cuando el central pasó a otro territorio, aquí, en el campo, nada ha cambiado. Los insumos contratados, así como el combustible, han llegado sin contratiempos, y la fuerza de trabajo no ha fluctuado". Por ello, advierte que si bien desde hace dos años, el río Santo Domingo se convirtió en una frontera natural entre dos provincias, en la margen izquierda, en territorio pinareño, miles de hombres siguen asumiendo con responsabilidad y con orgullo, la misión de hacer zafra.