Osbel se vira para la tierra

Bien temprano, cuando incluso el sol todavía no quería despertar  y el rocío empapaba  su ropa encontramos a Osbel Duarte Ruiz en plena faena agrícola en su intrincada finca del barrio tarabico, en San Juan y Martínez.

El antiguo motor de regadío estacionado muy cerca del río que bordea la finca recaba de Osbel  además de su juventud concentración en el arranque,  pues en no pocos casos  el descuido ha facilitado accidentes.

Duarte Ruiz  es uno de los 738 sanjuaneros acogidos al decreto ley 259 que ya traducen en toneladas de viandas, hortalizas, arroz, frutales y litros de leche, entre otras producciones entregadas al Estado su esfuerzo.

En los planteamientos del presidente Raúl Castro de que la producción de alimentos constituye  un asunto de seguridad nacional encontró Osbel, integrante de la Cooperativa de Créditos y Servicio Fortalecidad (CCSF) Francisco Blanco muchas motivaciones.

“Siempre me gustó trabajar en el campo, ví en esta resolución la posibilidad de tener mi tierra y hacerla producir como está pidiendo la máxima dirección de la Revolución, además aseguro el sustento familiar”

Junto a al padre Luís María su asesor principal este joven planifica con mucha pasión las próximas producciones y demuestra como algunos de los productos están ya a punto de cosecharse.

“Las tierras son fértiles, ya estoy planificando la siembra de plátano, habichuela, frijoles, boniato, tengo malanga, arroz y yuca cosechando en estos momentos. Creo que por mi la cooperativa no tiene que esperar para cumplir sus planes de acopio y la población recibirá estos beneficios”

“Cuando el hombre sirve, la tierra sirve” expresó Martí, y Osbel está demostrando que es de los hombre que cumplen con esa sentencia martiana.